Me encanta escuchar música; unas más que otras... y esta, en concreto, me transporta a otro lugar.
Muchas veces cierro los ojos y, dejándome llevar por ella, imagino que danzo por el aire. Subo, bajo. me desplazo en horizontal haciendo ondas, torbellinos... la música me da libertad....
También tiene el poder de hacer surgir emociones, recuerdos...
... y es que la música eleva el espíritu...
Propongo una actividad lúdica:
Escucha este tema, y con los ojos cerrados deja volar tu imaginación dejando a un lado pensamientos parásitos... siéntete libre... no hay nada que te impida ser lo que quieras... baila... o imagínate una historia que te surja....
.... y luego, en un papel plasma lo que te sugiere, escuchándola de nuevo.
¿Me contarás tu experiencia?
Me gustan diferentes estilos de música, y según el momento del día elijo uno u otro.
Propuesta de menú musical:
- Mañana: Clásica (me encanta levantarme un domingo con las "Cuatro Estaciones")
- Mediodía: New Age (mi preferida es "Encantamiento")
- Noche: Jazz
Y pensar que Vivaldi murió solo y con su música "pasada de moda"...
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